EXPEDICION AL TITANIC (*)

Momentos destacados de la expedición a los restos del Titanic de 2001

Belinda Sawyer y Don Walsh escribieron este resumen de los momentos más destacados para que lo podáis añadir a vuestra propia colección de notas e imágenes. Esperamos que este modesto esfuerzo os ayude a recordar esta expedición especial a un lugar especial.

Día 1: 16 de julio de 2001
El primer acto oficial de la expedición fue el almuerzo con el miembro del personal Don Walsh en el Hotel Fairmont Newfounland. Aquí conocimos a otros compañeros de tripulación y Don nos informó sobre el viaje que iba a empezar. Entre nuestro grupo de seis participantes en la expedición había cuatro estadounidenses y dos personas de otras partes, Lyle Reed (de Tejas) y Graham Elliot, de la Gran Bretaña y Australia.Jill Williams había pagado la inmersión como regalo de cumpleaños a su marido Bob, un entusiasta del Titanic. Sin embargo, ella no tenía intención de acompañarle. ¡He aquí un reto! Bob dio a entender que estaría muy contento de poder compartir la experiencia con ella y Don le habló de los sumergibles Mir y de lo seguras que son estas operaciones.
Le animó a que lo pensara y Jill respondió que quería oír más argumentos a favor de su inmersión.
Claro, que también puede que lo hiciera para que Don dejara de "vender"...
A las 2:30 llegó una furgoneta al hotel para llevar a los viajeros y alrededor de una tonelada de equipaje al Akademik Mstislav Keldysh, nuestro hogar para los próximos 10 días.
Allí se reunieron con nosotros Scott Hamilton y Nick Papadakis, que estarían en la expedición como viajeros con "espacio" para probar el equipo de imagen subacuático que habían desarrollado en el MIT. El Keldysh estaba atracado cerca del centro de St. Johns, de forma que el viaje desde el hotel duró sólo unos minutos. Descargaron el equipaje en el muelle y, ¿ahora cómo íbamos a subirlo todo por la empinada pasarela? Con un robusto "nyet problem" unos cuantos marineros rusos llevaron rápidamente el equipaje a nuestras habitaciones. No hay ascensores en el Keldysh, de forma que subir de dos a cuatro pisos el montón de bolsas no era tarea fácil. Decir que el Keldysh es impresionante es poco.
Con 6.240 toneladas, es el mayor barco de investigación oceanográfica del mundo: un buque en funcionamiento con la parte superior cubierta de grúas, botavaras, cabestrantes y otro equipo de aspecto formidable. En estribor, cara al puerto, había dos grandes ganchos para los sumergibles Mir, nuestros "carruajes" para el viaje al fondo del mar a dos millas de profundidad. Dentro del barco encontramos unas habitaciones limpias, espaciosas y confortables.
La mayoría esperábamos un alojamiento mucho más espartano pero, al contrario que la mayoría de barcos de "crucero", el Keldysh tiene mucho espacio para sus "pasajeros". Fue diseñado para expediciones de larga distancia, y para vivir varios meses en el mar es necesario mucho espacio en las cabinas. Después de deshacer las maletas, algunos aprovechamos para cruzar la calle que lleva al centro.
El "todos a bordo" no era hasta las siete, de forma que teníamos mucho tiempo para pasear o comprar algo. A las 8 PM, hora de salida, el tiempo había empeorado: había viento, llovizna y algo de niebla. Por el momento, nada de fotos, quizá tendríamos mejores vistas en pleno día a la vuelta de la expedición. Sin embargo, el cambio de tiempo nos recordó que debíamos coger las pastillas contra el mareo o ponernos los parches.A la hora de salida tuvo lugar la "recepción de bienvenida con champán" en el bar de la cubierta 7.
Mike McDowell, fundador y propietario de Deep Ocean Expeditions nos dio la bienvenida a bordo y nos presentó al personal de la expedición: la directora de expedición Belinda Sawyer; a los conferenciantes Dave Gallo, Bill Lange y Don Walsh; a nuestro médico Stuart Sugden y a la encargada del bar Michaela Klotz. También nos presentó a su mujer Regula y a sus hijos Thimothy y Kimberly, que estarían con nosotros en la expedición. Mike también mencionó a las tres personas que no se sumergirían y que estarían con nosotros: Scott Hamilton, Nick Papadakis y Craig McLean, capitán del cuerpo estadounidense NOAA (National Oceanic and Athmospheric Administration).
Craig es el director del departamento de Exploración Oceánica de la NOAA. Con un presupuesto de 14 millones de dólares quería ver el funcionamiento del Keldysh y el Mir en vista a posibles alquileres en el futuro para trabajos oceanográficos estadounidenses. Antes de la recepción, Don le pidió a Mike que hablara en privado con Jill sobre la inmersión con Bob. Le salió bien y parecía que ella lo iba a hacer, ¡ahora nos teníamos que asegurar que no cambiara de idea durante los próximos dos días de navegación hacia el lugar! Ella y Bob son "gente de mar" y ¿qué mejor experiencia marítima se puede tener que visitar el "gran barco”? Después bajamos al comedor para la "cena de bienvenida" a las 8:30.
Allí conocimos a nuestros simpáticos chefs australianos, Martin Thaler y Wolfgang Fellner, así como a las encantadoras camareras rusas Irina y Zoryana. Fue una comida espléndida, completada con caviar y vino para los que querían. Estaba claro que allí íbamos a comer bien.Después de la cena la mayoría fuimos a dormir, había sido un día largo y la diferencia horaria se hacía notar entre algunos. El día siguiente estaría lleno de actividades.

Día 2: 17 de julio de 2001
Estábamos ahora en el camino de St. Johns a la ubicación del Titanic, a unas 368 millas de distancia.
El Keldysh navegaba bien esa mañana, a pesar de balancearse un poco. La previsión no indicaba mal tiempo, aunque habría estado bien que hubiera un poco de sol en lugar de un cielo nublado y/o con niebla que de vez en cuando dejaba caer un poco de lluvia sobre nosotros.
¡Sorpresa, sorpresa! A las 7 AM el altavoz de nuestras habitaciones irrumpió a todo volumen con una llamada para despertar a la tripulación, algo como "buenos días", la fecha, el tiempo y la ubicación del barco. Y sólo 30 minutos más tarde otro anuncio: el desayuno de la tripulación se serviría en tres minutos. Algunos de nosotros intentamos descubrir cómo se apagaba eso, pero fue imposible. El altavoz de la pared y sus voces rusas, muy acordes, formarían parte de nuestra rutina diaria durante los próximos 10 días.Ahora que todos estábamos despiertos era hora de desayunar, a las 8:00. El buffet ofrecía una buena variedad de productos calientes y fríos ¡Nadie iba a pasar hambre en el barco!.
En el desayuno, Chuck y Barbara contaron que habían llevado algunas cintas y libros de ruso: esperaban que al final del crucero sabrían emplear mejor el complicado idioma (suena como un disco escuchado en sentido contrario).
Ya habían estado antes en barcos de expediciones rusas, de forma que ya podían utilizar algunas palabras.
Lyle dijo que todo el mundo entendía su idioma, el tejano, y Graham sólo se preguntó por qué tan poca gente puede entender su acento híbrido inglés-australiano.
Bueno, en realidad Belinda sí podía...Nuestro primer "acto oficial" de la expedición fue una sesión informativa por parte de Mike y Belinda sobre la vida a bordo del Keldysh.
Fue muy completa, incluso en los detalles de cómo utilizar el sistema de aspiración de los baños, pero estuvo bien aprender más sobre nuestro nuevo hogar y tener la oportunidad de preguntar sobre él.
Tiempo libre hasta el almuerzo, a las 12:30, aunque no podíamos quedarnos mucho tiempo en la mesa porque a las 2 había una sesión informativa sobre seguridad en el barco. Nyet problem... Irina y Zoryana, con la experta colaboración de Belinda y Michaela, llevaban y trían platos con naturalidad.El jefe Mate Andrei condujo la sesión informativa, con la colaboración de Vladimir, que leyó una traducción inglesa un poco críptica del reglamento ruso.
Nos advirtieron otra vez sobre los baños, con instrucciones expresas de "no poner hojas de té en el baño" (claro que ninguno de nosotros vio hojas de te sueltas en todo el viaje, a lo mejor la advertencia llegaba tarde...). También conocimos los detalles del empleo de las chaquetas salvavidas en la preparación para una maniobra con los botes salvavidas prevista por la tarde.
Por suerte, Mike estaba presente después de la sesión informativa en "inglés ruso" y nos aclaró algunos puntos. Además, los puntos clave estaban indicados detrás de las puertas de las cabinas.
A las 3, Don Walsh dio su primera charla: "Explorando los océanos del mundo: los mares que nos rodean".
Nos presentó con diapositivas una introducción general a los océanos como preparación para los 10 días de viaje en el Atlántico Norte. Una hora más tarde era el momento del té de la tarde, pastel y galletas en el comedor. Esta costumbre tan agradable y repleta de calorías se convirtió en una actividad diaria para la mayoría de nosotros.
De hecho, la única excepción iba a ser el día de la inmersión en el Mir.
A las 6 PM el jefe de la expedición, el profesor Anatoly Sagalevitch, con la colaboración de Mike, presentó una sesión informativa ilustrada sobre la "Operación Titanic" y operaciones de inmersión en general. Anatoly tiene una experiencia de casi 30 años en diseño, construcción y funcionamiento de sumergibles y es conocido como uno de los pilotos de sumergibles más experimentados del mundo.
La sesión informativa acabó con un vídeo muy interesante sobre varios años de trabajo del Keldysh y los Mirs.
Después fue el turno de las "copas de bienvenida" en el bar. Anatoly presentó al capitán del Keldysh, Yuri Gorbach, al director científico y profesor Yuri Bogdanov, y al piloto de Mir Genya Chernyaev, así como a otros miembros rusos del personal. También estaba presente la Dra. Natalia Sagalevitch, la mujer de Anatoly, que es bióloga marina y ahora realiza la función de "directora general comercial" de la operación Keldysh-Mir.
Después de sus explicaciones, Tolya nos invitó a considerar al Keldysh como nuestro "nuevo hogar" y a ser parte de la familia rusa de abordo. A pesar de las dificultades con el idioma, nos sentimos entre amigos.
Después tuvimos tiempo libre hasta la cena, a las 7:30. Otro gran banquete y la mayoría de nosotros volvimos a retirarnos pronto. Parecía que la buena comida, una copa y el suave movimiento del barco nos inducían al sueño.

Día 3: 18 de julio de 2001
¡Otra vez el altavoz a las 7 AM!. Bueno, de todas formas no es tan pronto levantarse a esta hora.
Desayuno a las 8. Éste también va a ser un día bastante completo pero la primera actividad no es hasta dentro de dos horas. Preguntamos a Chuck y Barbara cómo iba el ruso.
Repuesta: "Sin comentarios...". Barbara comentó que su prioridad para el "tiempo libre" era el libro de viajes de ambos.Más tarde el Keldysh puso tres transponedores acústicos con peso para delimitar la ubicación del naufragio del Titanic. Cuando estuvieran anclados al fondo enviarían tonos acústicos por orden de un transductor del Keldysh. El barco utilizaría su sistema GPS para localizar con precisión los transponedores.
Durante las inmersiones, los dos sumergibles los emplearían para asistir a la navegación alrededor de la ubicación del naufragio, bastante extensa.Al finalizar las operaciones de inmersión volverían a la superficie con una señal acústica de liberación. Se enviaría un tono para dar la orden de soltar el ancla a los transponedores. Después de llegar a flote en la superficie los retiraría una barca pequeña o el Keldysh.
A las 10 Anatoly y Mike dieron una sesión informativa sobre "Vuestra inmersión en el Mir".
Nos aportaron los detalles de una operación típica de inmersión y de lo que podíamos esperar de ella mientras durara. Inmediatamente después, los participantes en el primer día de inmersión, Chuck y Barbara Williams, Lyle Reed y Graham Elliot fueron guiados a bordo de los Mirs.
Una vez dentro, un piloto (Anatoly o Genya Cherniaev) dio información detallada sobre los procedimientos de inmersión y sobre la distribución del interior.Después de "probar" al primer grupo, Bob y Jill Williams subieron al Mir 1, donde Anatoly era su "guía". Probablemente allí fue donde se cerró el trato con Jill, Anatoly dijo que sería su piloto si ella decidía hacer la inmersión. ¿Cómo puede uno resistirse a eso?
Otro motivo menos obvio para una introducción al submarino es asegurarse de que nadie va a tener claustrofobia en un espacio tan reducido. ¡Es mejor saberlo en la superficie que en la inmersión!
Antes de la comida, nos mostraron el vídeo "Secretos del Titanic" en la sala de actos. Sin duda sirvió para abrir el apetito de ver en persona al gran barco.
A primera hora de la tarde Don dio su segunda charla: "Historia de la exploración tripulada de los océanos". En su discurso siguió la evolución marítima del hombre del 900 a.C. al presente. ¡Casi 3.000 años en una hora! Después del té, Dave Gallo y Bill Lange hicieron una presentación con charla y vídeo sobre el descubrimiento inicial y las expediciones posteriores al RMS Titanic. En 1984, Bill había participado en la primera expedición con el Dr. Robert Ballard.
Tanto las imágenes como la historia en primera persona de Bob fueron espectaculares.Por la noche, después de la cena, Dave y Bill nos mostraron unas imágenes en televisor de alta definición (HD TV) tomadas desde los Mirs el junio pasado en el acorazado Bismarck. Además de las extraordinarias imágenes, también hablaron de los detalles de la expedición.
Era la primera vez que los humanos visitaban el barco desde que naufragó en una batalla en mayo de 1940. Bill también nos contó la historia del descubrimiento de los restos del naufragio por parte de Ballard con un barco con sistema de remolque remoto. Él también había participado en esa expedición.
Pasadas las 10 se acabó el programa. Había sido un largo día con aprendizaje sobre los Mirs, una charla sobre inmersión de altura y visitas a través del vídeo a lugares de naufragios famosos.
El día siguiente, Chuck, Barbara, Lyle y Graham serían parte de esta historia.

Día 4: 19 de julio de 2001
Los cuatro submarinistas de hoy estaban puntualmente en el Mir a las 8 AM para la reunión matinal con el personal ruso. Anatoly habló de las actividades del día y asignó las tareas a su equipo. Informó en inglés a los submarinistas de las horas en que tenían que volver preparados para embarcarse a los submarinos.
El primer grupo a las 9:20 y el segundo un poco después de las 10. "Mamá" repartió los monos azules e hizo firmar a cada uno las hojas de navegación. Era hora de desayunar pero, claro, nuestros compañeros de tripulación se daba prisa, tomaron sólo un poco de comida para desayunar con poco o nada de líquidos. Parecía ser el mejor "régimen de preparación".
Miraban con envidia al resto del grupo cuando atacábamos al buffet. Pero, a ver ¿cómo podían tener envidia?, estaban a punto de empezar la gran aventura y dejarnos atrás a todos. Sobre las 9:20, Chuck y Barbara estaban listos para subir a bordo del Mir 1, pero primero tuvo lugar la foto ritual delante del submarino. Tolya se unió a ellos para la foto de grupo de los intrépidos "hidronautas", todos con sus monos azules.
"Foto Yuri" tomó las fotografías mientras el omnipresente Sergey manejaba su gran cámara de televisión para inmortalizar el momento y, claro, el resto de nuestros compañeros de tripulación estaban ocupados captando la acción desde varios puntos de las cubiertas sobre el área de funcionamiento del Mir. Como siempre, Mike estaba allí para despedir a los submarinistas. Finalmente los tres submarinistas estaban a bordo del Mir 1 y se cerró la escotilla.
El submarino se elevó rápidamente de la cubierta y pasó por el costado ¡La auténtica "Operación Titanic" acababa de empezar!Una vez en el agua, los "cowboys" fueron zumbando a la parte superior del submarino en una barca de goma y uno de ellos saltó a bordo y soltó el cable de elevación.
Entonces la barca Koresh (que significa "pequeño amigo" en ruso) remolcó el Mir 1 del Keldysh, con el cowboy montado encima. A unas 100 yardas del barco, el cowboy desató el cable remolcador y saltó a su barca. En ese momento el sumergible empezó el descenso, un acontecimiento poco dramático, nada que ver con un lanzamiento espacial. Estuvo un minuto balanceándose medio a flor de agua, cada vez más por debajo del agua, hasta que desapareció.Unos 30 minutos después de la inmersión del Mir 1, se repitió el ritual de las fotos delante del Mir 2 con Lyle, Graham y el piloto, Genya.
Hacia una hora después de que bajara el submarino, el Mir 2 le siguió hacia el abismo. Era un buen día para el submarinismo.Los que estábamos en la superficie observando la operación de botadura, quedamos sorprendidos de su buena coreografía. Fue realmente una actuación digna de una compañía de ballet.
Sin alzar la voz, con los movimientos justos y un completo control del traslado del submarino del barco al mar. Estaba claro que la gente, el equipo, habían trabajado juntos durante mucho tiempo. Después empezó la larga espera. El tiempo previsto de inmersión era de unas 11 horas; no veríamos a nuestros compañeros hasta la noche. Después de las botaduras vimos un vídeo sobre la fructífera búsqueda de Bob Ballard del Bismark en el 89.
Si bien no tenía una relación directa con el "tema Titanic", ilustró los tipos de tecnología y técnicas empleadas en las operaciones marítimas de altura.Durante el almuerzo, Belinda anunció que el Mir 1 estaba en el Titanic y que pronto le acompañaría el Mir 2. Todo iba bien, pero había una corriente bastante fuerte en el fondo y la visibilidad era algo limitada.
Sin duda pronto harían el "almuerzo a bordo del Titanic". El Keldysh proporcionó unas cajitas de plástico con el almuerzo preparadas la misma mañana con sandwiches, zumo, fruta y una chocolatina. Incluso había té caliente para quien quisiera. Los que estábamos "arriba" tuvimos la tarde libre, sin charlas programadas, ya que dos tercios de los participantes en la inmersión estaban en ese momento dos millas por debajo de nosotros. Cenamos con bastante rapidez, ya que esperábamos que los submarinos llegaran entre las 8 y las 9.
Finalmente el Mir 1 llegó sobre las 9:30. Fue realmente espectacular cuando conectaron las potentes luces submarinas. A lo lejos, todo lo que se veía en la oscuridad era una gran mancha de luz fuerte y azulada que brillaba justo debajo de la superficie. Una buena forma de encontrar los submarinos en la oscuridad, claro que también llevan radiofaros en caso de mala visibilidad.La Koresh puso rápidamente un cable remolcador en el submarino y lo llevó hasta el Keldysh. Una vez al lado del barco, uno de los cowboys saltó a bordo para enlazar el cable elevador. No era cosa fácil con el barco balanceándose y el submarino cabeceando con las olas, aunque hizo que pareciera muy sencillo y pronto el Mir 1 estaba en el aire de camino a su "plaza de aparcamiento" a bordo. Unos exhaustos pero contentos Chuck y Barbara subieron por la escotilla.
Gritos, aplausos y muchos flashes fotográficos les acogieron en el retorno al mundo de la superficie. Una vez en cubierta tomaron champán en réplicas de las copas Titanic White Star.
Enseguida se les unió el piloto Anatoly mientras Yuri y Sergey hacían las "fotos oficiales" del gran momento.Unos 40 minutos más tarde se repitieron los mismos acontecimientos con Lyle y Graham cuando volvieron del Mir 2 a bordo. Algunos de nosotros nos quedamos rondando por el bar esperando que alguno de los cuatro apareciera y nos explicara algo de su experiencia.

Día 5: 20 de julio de 2001
¡El día de Jill y Bob! Tal como estaba prometido, harían la inmersión con Anatoly en el Mir 1. La reunión previa a la inmersión, las actividades y fotos frente al sumergible fueron similares a las del día anterior. Parecían muy contentos y satisfechos de compartir juntos la experiencia.
Al ser los últimos de los seis participantes de la expedición en sumergirse, había dos asientos disponibles en el Mir 2, de forma que Mike y Don programaron una inmersión con el tercer piloto de Mir Victor Nischeta.
Don había conocido a Victor 20 años antes en la base científica Gelendzyk en el Mar Negro y ahora se sumergirían juntos por primera vez.Esta inmersión sería una oportunidad para probar la videocamara de Scott y Nick para luminosidad extremadamente baja, ya que la llevarían a profundidades sin luz solar.
El sistema, desarrollado por Nick en el MIT, fue diseñado para "ver" empleando únicamente la luz emitida por los animales abisales. Se esperaba que tomara fotografías de criaturas que normalmente se asustarían de las potentes luces del submarino.
Nick y Scott habían trabajado con Genya y Don para configurar el sistema y emplearlo en el Mir 2. Genya informó a Victor de como usarla y Don informó a Mike ¡Ya estaban listos!
El día estaba un poco más calmado durante la botadura y los submarinos pasaron por el costado y se pusieron en camino con bastante rapidez. Otra vez serían inmersiones de 11 horas y no volveríamos a ver los submarinos hasta las 8 o las 9 de la noche.
El único "entretenimiento" preparado a bordo era el vídeo "Tesoros de las profundidades", realizado por el conocido fotógrafo submarino Al Giddings y que presentaba unas imágenes excelentes del Titanic. Por la noche los submarinos volvieron a la superficie más o menos a la misma hora que la noche anterior. Otra vez hubo champán, fotos y un aire festivo general cuando los submarinistas volvieron al mundo.
¡Otro gran día a bordo del Keldysh!Sin embargo, se oyó un "¡ay!" avergonzado a bordo del Mir 2.
Cuando Mike y Don entraron en la esfera, el sistema de la cámara especial ya estaba instalado, preparado para funcionar. Victor sabía donde estaban todos los interruptores y botones, estaba preparado.
Cuando la inmersión ya había empezado, tuvo lugar el elaborado ritual de aislar la cámara por completo de toda luz de ambiente en el interior antes de conectarla: la menor luz dentro de la esfera cegaría la cámara especial.
Había una gran pantalla plana de vídeo, además de una pequeña en el vídeo. Ambas mostraban flashes de luz que parecían corresponder a las criaturas con bioluminiscencia que pasaban ante las portillas de visión; el aparato funcionaba, podían ver los resultados.
En la subida, cuando el submarino se aproximaba a la superficie, Mike empezó a guardar la cámara y entonces descubrió que la tapa del objetivo todavía estaba en la cámara. Victor mostró un ligero optimismo: "quizá por delante sea de cabeza de alfiler". Pero no lo era: el Mir 2 había grabado unas cinco horas de cinta en blanco. Los flashes de luz que se veían en la pantalla de vídeo era ruido eléctrico interno de la cámara ¡Fue algo duro explicarle a Scott y Nick que la gente que se dedicaba a esta operación de alta tecnología no entendía en tapas de objetivo! ¡Qué pena!

Día 6: 21 de julio de 2001
Día sin inmersiones para el mantenimiento de los Mir y para que los tres pilotos descansaran. También fue una oportunidad para los compañeros de tripulación que se habían sumergido para que fanfarronearan de sus experiencias en el naufragio del RMS Titanic.
Sin embargo, para que nuestros compañeros, especialmente los que no habían hecho inmersiones, no se cansaran de las "historias subacuáticas", había un buen menú de actividades planeadas para el día. Primero había una presentación matinal del metraje en HD TV del Titanic grabado los últimos dos días por las cámaras especiales de Woods Hole en ambos submarinos. Bill Lange empleó su magia en el equipo y nos obsequió con unas vistas precisas y espectaculares los restos del naufragio.
Por la tarde, Dave y Bill presentaron "Línea de vida: el descubrimiento de vida a lo largo de la cordillera intraoceánica". La presentación, dirigida por ordenador, mostraba varios espacios subacuáticos alrededor del mundo que había investigado la Woods Hole Oceanographic Institution.
Nos sorprendió la variedad y riqueza de las formas de vida marinas que viven en el mundo sin sol. Después de la cena, Don fue el "anfitrión" del film Rescaten el Titanic ("Raise the Titanic") una película épica de Hollywood de 1981 basada en el libro de Clive Cussler del mismo nombre.
Don había sido el asesor técnico de la película durante los tres años de producción. La película se hizo antes del descubrimiento del Titanic real y no tuvo éxito comercial.

Día 7: 22 de julio de 2001
Otro día de inmersión. En el Mir 1, pilotado por Genya, los submarinistas serían Mike McDowell y Bill Lange. Ésta sería la primera inmersión de Bill en un Mir.
Esta vez Mike no olvidaría la tapa del objetivo y Bill también estaba pendiente del problema. Al ser "el de la cámara", ¡era poco probable que lo olvidara, de todas formas! Mike, Bill y Genya estaban decididos a volver con buenas imágenes para Scott y Nick.Victor pilotaría el Mir 2 en una "inmersión técnica" con el biólogo marino Dr. Georgyi Vinogradov e Igor, un piloto en formación. Georgyi quería hacer una cuenta de plancton de la superficie al fondo, dos millas abajo, y el aprendiz de piloto tendría un tiempo adicional de "rodaje".
El tiempo de botadura y los procedimientos fueron más o menos los mismos que los días anteriores de operaciones. Cuando los submarinos se habían sumergido algunos de nosotros nos reunimos con Belinda en el comedor para su sesión especial de "Recuerdos: terapia al por menor".
Se ofrecía una variedad de productos con la marca "Titanic", que iba de buenos jerseyes a postales: "Cosas para todos los bolsillos", dijo. Después de "la hora de las compras", Dave prosiguió la proyección de imágenes en HD TV del Titanic del día anterior. Se trataba de un material claro y estupendo que parecía más bien una película que la vida real. Dave nos contó que el sistema HD TV tiene una resolución ocho veces mayor que las mejores videocámaras digitales para aficionados.
Después del almuerzo tuvimos un descanso de la serie de conferencias de Dave, Bill y Don, cuando el Capitán Craig McLean dio una charla fascinante sobre las directrices propuestas en el gobierno de los Estados Unidos sobre visitas al Titanic y sobre su conservación.
La mayoría de nosotros nos sorprendimos de los complejos temas legales que envuelven estos restos de naufragio.Más tarde, después del té, Don Walsh presentó "El Atlántico: anatomía de un océano". Esta charla se basaba en los conceptos presentados unos días antes en su introducción a los océanos mundiales.
Este día conocimos algunos aspectos concretos de los océanos que nos rodean.Los Mirs volvieron a cubierta por la noche alrededor de la misma hora. Mike y Bill obtuvieron unas imágenes realmente buenas del Titanic y Bill finalmente pudo hacer funcionar sus cámaras de HD TV.
También emplearon el sistema de cámara con poca iluminación durante los viajes al fondo y a la superficie. Comunicaron que esta vez había "imágenes reales" en las cintas. Cuando los sumergibles estuvieron asegurados en cubierta, el Keldysh se dirigió a St. Johns.
No se llevaron los transponedores: los dejaron en el fondo del mar para utilizarlos en la próxima expedición al Titanic, que empezaría el día 27.Desgraciadamente, nuestra Operación Titanic llegaba a su fin.

Día 8: 23 de julio de 2001
Día de camino a St. Johns. El largo oleaje y el cielo nublado nos obligaron a quedarnos dentro. Estuvo bien, había tres charlas programadas, que empezaron por la mañana con una charla fascinante de Dave y Bill sobre la ayuda de un equipo de Woods Hole en la resolución del misterio de las causas del hundimiento del carguero Derbyshire con toda la tripulación.
Las pruebas forenses fueron encajando poco a poco y con gran precisión gracias a miles de imágenes fotográficas. Y, finalmente se encontró la respuesta. Una escotilla suelta cerca de la proa no se había cerrado bien y con las aguas movidas el mar entró violentamente y causó un fallo en cadena casi explosivo en los compartimentos de carga.
El Derbyshire debió hundirse en cuestión de minutos después de empezar la primera inundación. Fue una lección que dio que pensar en la superioridad del mar sobre los inventos del hombre. Claro que ya lo sabíamos gracias a las inmersiones al "invencible" Titanic...
Antes del almuerzo, Don dio la charla "A quién pertenecen los océanos: ¿a quién le importan?". Fue un repaso de las condiciones históricas y actuales de la ley marítima y la ley de conservación marítima.
Durante la conversación sobre temas actuales de conservación de naufragios, Craig McLean se unió con Don para añadir informaciones recientes sobre el tratado propuesto por la UNESCO sobre legado cultural subacuático.
Esta charla nos dio la oportunidad de entender cómo pueden afectar los temas políticos y legales a las actividades de la ciencia y tecnología oceánicas en los océanos del mundo. También conocimos un poco más a fondo las considerables diferencias culturales entre los arqueólogos marinos y los conservadores de buques hundidos.
Después del almuerzo, Scott y Nick nos mostraron un avance de las imágenes de la inmersión del día anterior. La verdad es que hacía falta un poco de imaginación para ver los animales luminosos. Sin embargo, los metrajes experimentales anteriores de las pruebas realizadas en el laboratorio del MIT de Nick y en Hawaii con el submarino DeepWorker habían demostrado el potencial real del sistema.
En el caso de las inmersiones del Mir, es probable que se moviera con demasiada rapidez en la columna de agua para poder captar imágenes excepcionales de animales; estaban en el vídeo, aunque mal definidas.
Después vimos un programa realmente espectacular presentado por Dave y Bill: "Medusas: el mundo en profundidades medias".
Las imágenes de estas criaturas algo fantasmagóricas que flotan en el negro océano abierto son fantásticas: con más color y complejidad de lo que podríamos haber esperado, las medusas constituyen una de las mayores concentraciones de biomasa de los océanos.
Casi tan fascinante como estas imágenes eran los detalles técnicos de la realización de las fotografías en profundidades medias del mar. Fue una auténtica proeza de los equipos de Woods Hole que realizaron ese trabajo.
Antes de la cena tomamos unas copas de despedida en el bar. Mike y Anatoly nos hablaron un poco de la expedición y lo que habíamos conseguido. Algunos tripulantes de Mir y el capitán Yuri se unieron a "Tolya" para la presentación de "certificados de graduación" como prueba que habíamos estado en el Titanic.
Además nos dieron a cada uno una hoja personalizada de las fotografías de "Foto Yuri" con cada uno de nosotros el día de la inmersión, la "foto de clase" y algunas del Titanic. Tolya cerró la ceremonia pidiéndonos que consideráramos el Keldysh como nuestro hogar si teníamos la oportunidad de volver.
Después bajamos al comedor para la "Cena de Despedida": una vez más, Martin y Wolfgang nos sorprendieron con un banquete muy especial. Las señoras, las siempre eficientes Irina, Zoryana y Michaela se cuidaron de que las cosas fueran bien. Belinda, nuestra "maître" extraoficial, salía de vez en cuando para ayudar cuando era necesario.

Día 9: 24 de julio de 2001
Por la mañana tuvo lugar la primera proyección del vídeo de nuestra expedición. Anatoly nos mostró el vídeo, grabado, editado y producido por Sergey y Genya, era un trabajo maravilloso hecho con profesionalidad y cada uno de nosotros se quedó con una copia.
Después tomamos un almuerzo rápido y salimos a la parte superior para ver la entrada al puerto de St. Johns. El cielo se había aclarado un poco y estaba parcialmente soleado a pesar de hacer bastante viento. El piloto embarcó alrededor de las 2:30, a más o menos una milla fuera de la entrada.
Al acercarnos al puerto el cielo se aclaró y la temperatura subió 10 grados en cuestión de un o dos minutos. La expedición terminó con un tiempo perfecto.
Una vez atracados teníamos unas horas antes de la cena para ir a la ciudad o, para los más previsores, hacer el equipaje. Por suerte no había necesidad, ya que nadie tomaba el avión ese día.

Día 10: 25 de julio de 2001
¡La despedida a nuestros nuevos amigos y compañeros de tripulación!.
Los diez días habían pasado muy rápido, ciertamente, el tiempo se había hecho mucho más agradable con un grupo de compañeros de viaje tan alegre. Estuvimos de acuerdo en que estaríamos contentos de volver a viajar con el mismo grupo.
Habíamos comido bien: los chefs habían preparado varias comidas temáticas que iban de la cocina francesa a la italiana, así como el tan abundante banquete de "Fruhschoppen bávaro".
Quizá lo único que no convenció fue el buffet italiano en la cubierta de la piscina: hacía un poco de sol pero los fuertes vientos hacían volar un poco la comida de los platos. Y todos y cada uno de los días, tres comidas por día, el servicio eficiente y amable de Irina y Zoryana aumentaban el placer de las comidas mientras el servicio de bar de Michaela se aseguraba de que no había copas vacías.Desayuno "a la hora de las gallinas" a las 6:30 para Bob, Jill, Lyle y Craig antes de que se fueran a las 7 hacia el aeropuerto. Antes de acabarse el día todos nos habríamos ido del Keldysh. Mientras, el personal y la tripulación empezaban los preparativos para la próxima expedición, que saldría de St. Johns la noche siguiente con un lleno de 16 participantes.

(*) Texto cedido por Joaquim Casellas de la Web Movin Marine
http://www.movinmarine.com

(Gracias Joaquim)