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JUAN MANUEL

Creador de la Web FRITANIC

14-15 de abril de 1912.
En la era en la que las maquinas gobernaban moralmente la civilización, en un oscuro océano la muerte se palpaba fría como el hielo. El Titanic zarpaba asta su ultima morada y con esta dama de gris 1523 personas.
Inmigrantes, ricos, niños, un largo etc. Cada persona una historia, pero que todas con igual final.
El Titanic por causas del destino se hundió dejando al mundo herido de muerte. El símbolo de las aguas de ese momento había desaparecido un poco mas de dos horas. La majestuosidad del gran buque dejo paso a una oscuridad llena de gritos y llantos que se iban apagando igual que las vidas que se iban desapareciendo.

14-15 de abril del 2004
92 años después nos juntamos en un momento de silencio para recordar no solo al Titanic si no a la gente que viajo en el, para recordar que precio hubo que pagar por la arrogancia del ser humano. Nuestra dama de gris nos mira y nos indica con su fría mirada que no cometamos el mismo delito y yo me pregunto realmente hemos aprendido algo. Esperamos que en el día de hoy con la muerte del Titanic y todos los fallecidos, realmente podamos decir que si pudo cambiar algo, por pequeño que haya sido el cambio.

Desde fritanic.com escribimos estas líneas en memoria del Titanic y sus pasajeros, gracias.

En la oscuridad del océano
Descansan las almas perdidas
De unos pasillos solitarios
Que ya no ven la luz del día.

  En la oscuridad del océano
Se pierden los recuerdos
De unos seres del pasado
Que solo vemos en sueños

  En la oscuridad del océano
Reposan deseos e ilusiones
De personas del pasado
Que buscaban vidas mejores.

  En la oscuridad del océano
Se pierde poco a poco la vida
Por un orgullo desbocado
Que nos nublo la vista.

  En la oscuridad del océano,
Lentamente la vemos morir
Y la dedicamos este adiós
A la dama de gris, Titanic.

Juan Manuel 

Gracias a todas las personas que hacen posible que año a año la memoria del Titanic todavía perdure, y esperamos que aunque el Titanic desaparezca de su tumba, todavía le recordemos en nuestros corazones y que podamos viajar por sus pasillos y habitaciones en nuestra mente.